Las telas de forro se utilizan en el interior de las prendas para brindar comodidad, protección y apoyo. Por lo general, están hechos de materiales livianos y suaves y se usan para cubrir las costuras y agregar estructura a la prenda. 
  
   
   Acetato: el acetato es una fibra sintética que es suave, liviana y tiene una sensación suave y sedosa. A menudo se utiliza como tejido de forro debido a su capacidad para cubrir bien y resistir las arrugas. 
  
   Nailon: el nailon es una fibra sintética ligera, duradera y con un tacto suave y sedoso. A menudo se utiliza como tejido de revestimiento debido a su capacidad para proporcionar soporte y resistir las arrugas. 
  
   Poliéster: El poliéster es una fibra sintética ligera, de secado rápido y con un tacto suave y sedoso. A menudo se usa como tejido de forro debido a su capacidad para mantener su forma y resistir la decoloración y el daño causado por el lavado. 
  
   Rayón: el rayón es una fibra sintética que es suave, liviana y tiene una sensación suave y sedosa. A menudo se utiliza como tejido de forro debido a su capacidad para cubrir bien y absorber la humedad. 
  
   Satén: El satén es un tipo de tela conocida por su superficie lisa y brillante y su tacto suave y sedoso. A menudo se utiliza como tejido de revestimiento debido a su capacidad para proporcionar una sensación suave y lujosa contra la piel. 
  
               Al elegir un           fabrica de lino          , considere los siguientes factores:         
     -          Comodidad: elija una tela que sea suave, transpirable y cómoda contra la piel, como seda, satén o acetato.     
-          Transpirabilidad: busque telas que permitan que el aire circule libremente, evitando la acumulación de calor y manteniendo cómodo al usuario.     
-          Durabilidad: Seleccione una tela que sea fuerte y duradera, especialmente si la prenda estará sujeta a uso y lavado frecuente.     
-          Peso: considere el peso de la tela y elija un forro que sea apropiado para el tipo de prenda en la que se usará, como un forro liviano para un vestido de verano o un forro más pesado para un abrigo de invierno.     
-          Resbaladizo: Elija una tela que no se adhiera a la tela exterior, creando una superficie lisa y permitiendo que la prenda cubra bien.     
-          Color: Considere el color del forro y elija un tono que combine con la tela exterior o agregue un acento, según el aspecto deseado.     
-          Costo: Considere el costo de la tela y compárelo con los beneficios que brinda en términos de comodidad, durabilidad y rendimiento.     
   Al considerar estos factores y elegir un tejido de forro que satisfaga sus necesidades específicas, puede asegurarse de tener un forro que proporcione la combinación correcta de comodidad, durabilidad y estilo para su prenda.